Le brindamos la oportunidad de pasar una jornada en las costas más cálidas y agradables de Catalunya.
Visite la histórica localidad de Tarragona, la antigua Tarraco Romana y disfrute de la hermosa Sitges, llena de rincones mágicos de encanto modernista. Todo en una misma excursión desde Barcelona y con recogida y regreso a su hotel o apartamento. Una estupenda jornada en la mejor playa urbana de Europa, la playa de San Sebastián, en Sitges.
Les recogeremos en su hotel, en un vehículo privado, para recorrer los lugares más auténticos de estas dos poblaciones costeras. situadas al sur de Barcelona, frente al mar Mediterráneo.
A 100 km al sur de Barcelona encontramos Tarragona, una de las ciudades más importantes y con más legado romano de la Costa Dorada. Sus playas de arena fina y aguas cristalinas y su excelente clima hacen de Tarragona un destino privilegiado. Dada su excelente ubicación y características geográficas, esta ciudad fue una importante urbe romana, por lo que alberga uno de los conjuntos arqueológicos romanos más importantes y mejor conservados de España, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Tarraco fue la capital de la antigua Hispania Citerior, una de las tres provincias que conformaban la Península Ibérica hace aproximadamente dos mil años.
Con el guía especializado nos adentraremos en este histórico escenario. Nuestra primera parada será en para admirar el Acueducto de les Ferreres, también llamado ‘Pont del Diable’ (puente del diablo). Tiene una longitud de 217 m y una altura de 26 m, se trata de una impresionante estructura al tiempo que un espectacular ejemplo de la avanzada ingeniería romana. Esta será una antesala de lo que seguidamente podremos disfrutar.
A continuación entraremos en Tarragona. Primero realizaremos un tour a pie en el que tendrán la posibilidad de descubrir los interesantes restos, que se conservan de aquella civilización, mientras nuestro guía les relata apasionantes historias y leyendas.
Recorreremos las gruesas Murallas, que defendían esta gran ciudad. Pasaremos a través de sus imponentes puertas de acceso. Después nos adentrarse en uno de los Circos mejor conservados de Occidente. Una maravilla medio oculta bajo las estructuras de los edificios del siglo XIX. Podrán comprobar como conviven las huellas del antiguo Foro Romano con la medieval y moderna Tarragona. Es curioso observar como esta parte de la ciudad sigue siendo, después de pasados 2000 años, el centro de actividad de esta histórica ciudad.
Dejaremos Tarragona y su importante pasado histórico para dirigirnos a otra localidad cuyo encanto está impregnado de la huella del modernismo y de los intelectuales y artistas que eligieron esta bonita ciudad para pasar largos períodos.
Sitges está situada en la Costa del Garraf, a 38 km de Barcelona y a orillas del Mediterráneo. Es una ciudad llena de luz y alegría que tiene una la atracción de su privilegiada ubicación y el encanto que desprende. Ofrece al visitante esa mezcla de mar y montaña, que la convirtieron en un lugar muy escogido para practicar el turismo de salud. Posiblemente, todas esas agradables características la han convertido, desde hace muchos años, en un curioso enclave donde artistas de todo tipo establecieron y siguen estableciendo hoy en día su residencia y sus estudios de arte.
En Sitges encontramos su aspecto tradicional, con sus casas de origen pesquero que contrasta con el ambiente bohemio y animado de sus calles y locales, lleno de boutiques, restaurantes, músicos y artistas. La esencia del puro sabor mediterráneo, alegre y cordial, abierto y acogedor.
Acompañados de nuestro guía, realizaremos un pequeño tour a pie por la localidad, que nos conducirá por sus maravillosas calles y rincones más escondidos de su laberíntico centro lleno de vida y ambiente alegre.
En este recorrido podremos admirar algunos ejemplos del modernismo catalán como la Casa Bacardí o la ‘gaudiniana’ Casa del Rellotge y escucharemos curiosas historias y leyendas de los ‘americanos’, que volvieron enriquecidos del nuevo continente.
Pero la fama de Sitges –también llamada la ‘Saint Tropez de España’– se debe en gran parte a ese perfil que la hace idílica: su delicioso paseo al lado del mar, la iglesia de San Bartolomé y Santa Tecla, que se alza majestuosa sobre la gran escalinata, el Palacio de Maricel o el encantador Rincón de la calma –donde habitualmente hay músicos amenizan el ambiente con sus melodías– Todo ello nos ofrecerá un magnífico recorrido que nos llevará hasta la playa de San Sebastián, una extensa y extraordinaria playa de fina arena y aguas claras, que hace las delicias de todos los que visitan la ciudad.
Finalizaremos nuestra jornada contemplando esa idílica postal de la playa que, según un artículo del New York Times, puede considerarse la mejor playa urbana de Europa. Tendrán la oportunidad de relajarse en una variada oferta de agradables terrazas o, si el tiempo acompaña, darse un baño en sus aguas cristalinas o caminar por la orilla del mar, dejando que sus olas les acaricien los pies.